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La Medición de la Gestión adecuada en PRL: ES POSIBLE

¿Dónde he estado y qué me ha pasado?   

Hace unas semanas, en una Jornada de Formación para Técnicos de Prevención, surgió el debate entre la dificultad de poder evidenciar las relaciones entre el trabajo en PRL y los resultados que se obtienen en siniestralidad. Todavía se oían comentarios sobre la “mala suerte” o sobre el gran número de factores “incontrolables” que influyen en la siniestralidad laboral.

Es un debate antiguo que, normalmente, “pierden” los que tratan de medir y relacionar variables. Tras la jornada se generó dentro de mí otro debate interno, ¿cuál es mi posición al respecto? Y siempre he tenido dudas que, ahora, creo que es un buen momento para resolver.

Con este fin, visité al Responsable de Prevención de una empresa de telefonía con el que comparto estas dudas. Es una empresa de unos 1.500 trabajadores que se dedica a instalar y reparar líneas telefónicas con un número importante de trabajadores que presta servicios en el exterior.

Decidimos profundizar en nuestra duda y elaborar posibles relaciones medibles entre el trabajo en PRL y los índices de siniestralidad que facilita la MCSS de que dispone la empresa.

¿De qué medios dispone la empresa para avanzar en esta situación?    

Tras algunas reuniones, en las que nos ayudó un experto en análisis de datos, valoramos comenzar con las siguientes variables en los trabajos realizado por la empresa en el exterior:

  • Horas de formación específica impartidas a los trabajadores.
  • Número de visitas realizadas por los técnicos de prevención a lugares de trabajo exteriores.
  • Porcentaje de rotación de personal.

Estos tres índices se han estudiado en relación al número de trabajadores, aunque existe poca variación, y en los dos ejercicios anteriores a la fecha.

Con todo ello, hemos definido un plan de acción que tiene tres objetivos:

  1. Incrementar en un 10% las horas de formación específica impartida por los técnicos de prevención a los trabajadores de campo en la Comunidad de Madrid.
  2. Igualmente, incrementar en otro 10% las visitas que los técnicos de prevención realizan a los distintos tajos, en la provincia de Zaragoza, donde los trabajadores prestan servicio.
  3. Arbitrar, junto con Dirección y Recursos Humanos, una política que reduzca la rotación existente en la empresa, actualmente cifrada en un 12% (porcentaje de bajas sobre total empleados) en Cataluña.

Se trata de una prueba piloto que nos permita comparar los resultados obtenidos en una zona concreta con una acción preventiva concreta con el resto de la organización, observando así el impacto concreto de la acción sobre los índices de siniestralidad de Incidencia y Frecuencia.

Nos hemos dado un plazo de 12 meses para, después, comparar con los datos obtenidos al inicio y ver si los resultados de las acciones en prevención de riesgos laborales se pueden medir.

Si conseguimos medir, y la medición nos convence, éste será el principio de una nueva política de trabajo en el Servicio de Prevención Propio, concretando acciones (formación más concreta, visitas con contenido específico, rotación según tipo de puesto…) y resultados de un modo mucho más empírico y evidenciable. En principio, vamos a medir únicamente en relación a los distintos índices de siniestralidad, pero Dirección ha mostrado ya interés en la medición del impacto de las distintas acciones preventivas sobre los resultados de la empresa. Todo un reto.

¿Qué resultados se han obtenido?    

Han pasado los 12 meses que nos marcamos en el Plan de Acción y acudo ansioso a la empresa mi colega para ver los resultados obtenidos. Me traslada lo siguiente:

  1. Se ha conseguido llegar a las horas de formación y visitas prefijadas en el Plan de Acción y la rotación general se ha disminuido hasta un ratio del 8,75%.
  2. El índice de frecuencia (Nº accidentes/Nº horas trabajadas) x106ha disminuido en Zaragoza un 12,4%, en Madrid un 8,2% y en Cataluña un 16,5%, cuando en el resto de zonas se mantienen los índices de años anteriores.
  3. El índice de incidencia (Nº accidentes/Nº medio de trabajadores) x 105) ha experimentado una reducción en Zaragoza del 11,5%, en Madrid del 8,4% y en Cataluña del 20,1%.
  4. Deducimos por tanto que, aunque todo es positivo, lo más efectivo es la disminución de la rotación, seguido del incremento de las visitas de los técnicos y terminando con el incremento de la formación específica. Se va a comenzar en breve a extrapolar las acciones al resto de las zonas geográficas de la empresa.El resultado es más que esperanzador y cuantifica los resultados de las acciones preventivas y, además, estos datos se pueden llevar claramente al coste exacto de la siniestralidad laboral -aspecto en el que ya se ha comenzado a trabajar-, demuestra que las acciones en prevención generan un impacto positivo y que parecen ser medibles, lo que la empresa pretende confirmar con estudios posteriores que alcanzarán también a relacionar las acciones preventivas con los resultados económicos de la organización. Desde luego, todo un reto que demostrará y cuantificará el impacto positivo de una adecuada y dirigida gestión en prevención de riesgos laborales sobre los resultados empresariales.Pero es necesario disponer de datos fiables y analizarlos adecuadamente.

    “Cualquier parecido con la realidad NO es pura coincidencia”

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